Se recomienda hacerlo de forma segura y no después de lavarse los dientes.
Muchos de los practicantes del beso blanco están en riesgo y no lo saben, pero el guardar el semen en la boca y después pasarlo al otro a través de un beso podría acarrear infecciones como gonorrea, clamidia, virus del papiloma humano, sífilis o hepatitis B y C.
Eso sin contar que si la persona que guarda el semen tenga heridas bucales o encías ensangrentadas porque podría transmitir VIH en caso de que se desconozca como portador. Por ello, te recomendamos que también se haga de forma segura y no cuando alguno de los dos acabe de lavarse los dientes.
Por SDP Noticias