El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió este lunes en rueda de prensa de la posible futura aparición de un nuevo virus potencialmente más peligroso que el covid-19.
“No es la última vez que el mundo se enfrentará a la amenaza de una pandemia. Según las estimaciones evolutivas, surgirá un nuevo virus que podría ser aún más contagioso y más mortal que el virus actual”, subrayó Tedros.
“Este es el momento para las ideas, el compromiso y el liderazgo audaces, para hacer cosas que nunca se han hecho antes. Tenemos que elegir una opción: entre la cooperación, la competencia o la confrontación”, comentó el jefe de la OMS. “Si los más atrasados son los primeros en recibir ayuda, si los más débiles son los primeros en ser fortalecidos y si los más vulnerables son los primeros en ser protegidos, entonces todos ganamos”, destacó.
Asimismo, informó que al menos 115.000 trabajadores sanitarios han muerto por сovid-19 en todo el mundo desde que comenzó la pandemia.
Vacunación desigual
Además, Tedros Adhanom Ghebreyesus denunció la “escandalosa desigualdad” en la distribución de vacunas. Según el funcionario, más del 75 % de todas las vacunas se han administrado en solo 10 países. “Un pequeño grupo de países que fabrican y compran la mayoría de las vacunas del mundo controlan el destino del resto del mundo”, se lamentó.
El jefe de la OMS instó a los países a donar dosis de vacunas al mecanismo COVAX para que el 10 % de las poblaciones de todos los países haya sido inoculada en septiembre, con el objetivo de alcanzar el 30 % a finales de año.
“Así que hoy pido a los Estados miembros que apoyen un esfuerzo masivo para vacunar al menos al 10 % de la población de cada país para septiembre”, comentó el director general de la OMS. Agregó que el objetivo de la campaña sería la vacunación de 250 millones de personas en países de ingresos bajos y medianos en un plazo de cuatro meses, incluyendo a todos sus trabajadores sanitarios. La campaña se extendería hasta diciembre con el objetivo de inmunizar contra la enfermedad al 30 % de la población de cada país, detalló Tedros.
El año pasado, la OMS y otras organizaciones crearon COVAX, un mecanismo global destinado a garantizar el acceso de los países más pobres a las vacunas contra el covid-19. Sin embargo, la iniciativa sigue careciendo de fondos suficientes y se ha enfrentado a una importante escasez de suministros.
“Hemos enviado cada una de las 72 millones de dosis que hemos podido conseguir hasta ahora a 125 países y economías”, dijo Tedros, quien lamentó que esas dosis solo fueran suficientes para cubrir apenas al 1 % de las poblaciones combinadas de esos países.