Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al lugar, donde confirmaron que el conductor de la unidad ya había fallecido.

Un joven murió la mañana de ayer, al estrellar un automóvil Mini Cooper durante una prueba de manejo. Los primeros reportes indican que circulaba a unos 160 kilómetros por hora cuando perdió el control de la unidad y ocurrió la tragedia.

El accidente se registró a las 10:49 horas, cuando en el número de emergencias se recibió el reporte de que un vehículo se había accidentado sobre la avenida Huayacán, a aproximadamente un kilómetro del libramiento a Mérida.

Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al lugar, donde confirmaron que el conductor de la unidad ya había fallecido, mientras que el copiloto se hallaba lesionado, por lo que lo trasladaron al hospital de especialidades del IMSS, de la Región 510.

El perito de Tránsito, Juan José Zaldívar, en su informe detalló que el accidente se registró por la velocidad inmoderada con que era guiado el vehículo, su conductor perdió el control y originó que con la gravilla se saliera de la vialidad hacía el lado derecho.

La unidad ingresó al área verde, recorrió aproximadamente 50 metros, hasta que montículos de piedras y arboles detuvieron la unidad.

El vehículo de lujo, sin placas, pero con permiso para circular, quedó en medio de la maleza, prácticamente dañado en toda la carrocería; el operador de la grúa tuvo que realizar algunas maniobras para sacar la unidad.

Los peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) también tuvieron que realizar algunas maniobras para sacar el cuerpo del conductor, el cual presentó diversas fracturas, mismo que fue trasladado a las instalaciones del Semefo para la necropsia de ley.

De acuerdo a las autoridades, el vehículo era de una agencia automotriz usado para las pruebas de manejo, y el hoy occiso era el cliente y el lesionado empleado de la agencia.

Por El Imparcial de Oaxaca