Para los maoríes, incluso subir a la cima del pico es inapropiado.
La fotografía de Jaylene Cook, una modelo de Playboy, en donde aparece completamente desnuda en la cima del monte sagrado de Taranaki, en Nueva Zelanda, ha desatado la indignación de los maoríes, una etnia polinesia, y miles de usuarios de redes sociales.
El hecho dividió la opinión pública entre quienes defienden la expresión artística, ya que la foto fue imagen por su pareja, el fotógrafo Josh Shaw, y los que abogan por el respeto de las creencias y tradiciones.
“Fue una idea de Josh. Pensamos que no podía ser muy difícil, así que fuimos a algunas tiendas para conseguir ropa de abrigo. Empezamos a las dos de la mañana. Fue más difícil de lo que pensábamos, nunca había subido”, cuenta Cook sobre cómo subieron el monte.
Ya arriba, los enamorados decidieron festejar con la arriesgada foto. En ella, la mujer luce de espaldas y lleva puestos únicamente sus guantes, un gorro de lana y unos tenis.
“No es ordinaria ni explícita de ninguna manera. Fuimos muy respetuosos. Estar desnuda no es algo ofensivo, es natural y puro, y tiene que ver con la libertad y el empoderamiento”, dice la modelo.
No obstante, para los maoríes, incluso subir a la cima del pico es inapropiado, pues se realiza con fines únicamente ceremoniales dado que se trata de un lugar sagrado en donde descansan sus ancestros. “La fotografía es culturalmente insensible”, argumentan.
Con información de RT.