Al finalizar el partido entre Monarcas y Necaxa, que terminó 2-1 a favor de los purépechas, un pseudoaficionado entró al campo, esquivó al personal de seguridad e intentó golpear a un jugador del cuadro de los Rayos.
El hecho obligó a los elementos de seguridad y finalmente el rijoso fue capturado. Sin lugar a dudas un hecho lamentable que provocó la reacción de los técnicos de ambos equipos, Roberto Hernández (Monarcas) y Alfonso Sosa (Necaxa).
“Es un riesgo que se corre al quitar las mallas, no debe pasar, es lamentable que esto ocurra”, manifestó el entrenador del cuadro michoacano.
A su vez, Hernández espera que la Liga MX no tome una decisión que perjudique a su escuadra, ya que el contar con su afición en el cierre de torneo es muy importante para ellos, más ahora que tienen posibilidades de entrar a liguilla.
“Ojalá que no veten el estadio, porque cerrar el torneo con nuestra afición es algo muy importante para nosotros”.
Por su parte Alfonso Sosa señaló que, “es responsabilidad de todos no solapar a delincuentes que manchan el futbol, es responsabilidad de todos”.
Según la versión de los reporteros que estaban en el estadio de Morelia, una persona se brincó a la cancha pero los de seguridad lo interceptaron y se lo llevaron.
Por Vanguardia