La entidad se mantiene como el estado más pobre del país, según estudios de funcionarios del organismo
A tres años de que el perredista Juan Sabines llegó a la gubernatura y a unos meses de efectuarse los comicios intermedios, persiste el rezago social que ha marcado al estado durante décadas.
Chiapas es la entidad de mayor pobreza del país, de acuerdo con funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pues presenta el más bajo índice de desarrollo humano, con una población total de 4 millones 293 mil 459 personas.
A su vez, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) identificó a 28 municipios de la entidad con el menor índice de desarrollo humano, a los que plantea dar prioridad en materia de combate a la desigualdad.
Los chiapanecos llegarán al próximo 4 de julio, cuando elegirán a sus 24 diputados locales de mayoría relativa y a sus 118 alcaldes, sin haber podido dejar ese primer lugar en pobreza.
El estado, uno de los diez más grandes del país, ha elevado a rango constitucional los objetivos del milenio propuestos por la ONU, con la finalidad de hacer un combate frontal a la desigualdad y mejorar las condiciones de vida de los más pobres.
La responsable de Punto Focal de Agua y Saneamiento del Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-HABITAT), Diana Siller Contreras, sostuvo que Chiapas presenta el más bajo índice de desarrollo humano del país, un alto y muy alto grado de
marginación.
Incluyendo, abundó, a las 12 etnias que suman 26 por ciento de la población total, con aproximadamente un millón 200 mil personas.
El número de habitantes en Chiapas sin acceso a servicios de agua potable es de 1.1 millones; sin acceso a servicios de saneamiento, 891 mil; en tanto, que el número en condición de pobreza alimentaria asciende a 2 millones 17 mil 517, contabilizó.
Y añadió que el número de personas en condiciones de pobreza de capacidades es de 2 millones 399 mil 233; en tanto, que el de habitantes en condiciones de pobreza de patrimonio asciende a 3 millones 248 mil 450.
Localidades más pobres
Los municipios más pobres de la entidad son Sitalá, Santiago El Pinar, Aldama, Chalchihuitán, Mitontic, San Juan Chamula, San Juan Cancuc, Chenalhó, Chanal, Zinacantán, Chilón, San Andrés Duraznal, Pantelhó, Ocotepec, Francisco León, Pantepec, Tumbalá y Amatenango del Valle.
Asimismo, Larráinzar, Huitiupán, Maravilla Tenejapa, Huixtán, Marqués de Comillas, Salto de Agua, Amatán, Sabanilla, Oxhuc y Tenejapa, donde se concentra una población de 638 mil 662 personas, 98 por ciento de los cuales son indígenas.
A su vez, la delegada de la Sedesol, Socorro Zavaleta Cruz, señaló que una muestra de la pobreza es que el programa Oportunidades apoya a 560 mil familias con más de 600 mil destinatarios, una inversión de 5 mil 100 millones de pesos en pisos firme, más la atención de 107 mil adultos mayores con el Programa 70 y Más.
En tanto, el secretario del Campo en la entidad, José Ángel del Valle Molina, destacó que el compromiso del gobierno es erradicar la pobreza, el hambre y promover la sustentabilidad del medio ambiente.
Para lo cual, prosiguió, se reforzarán las estrategias transversales para garantizar la seguridad alimentaria y añadió que 70 de cada cien habitantes dependen de las actividades del campo y la mayoría consume lo que en éste se produce. Sostuvo que el reto es elevar los rendimientos y, para ello, cada sistema-producto contará con los apoyos necesarios en maquinaria, equipo agrícola, asistencia técnica, garantías líquidas, créditos, bajo una estrategia con base en las potencialidades de cada uno de los 118 municipios.
Cultivos tradicionales
El Convenio de Confianza Agropecuario (Codecoa), dijo, seguirá como una estrategia sustantiva para articular los programas y recursos que ayuden a fortalecer los cultivos tradicionales, pero también el café, cacao, palma de aceite, hortalizas, arroz, sorgo, soya, cacahuate, forestales, lácteos, miel, flores y especies pecuarias.
Con especial atención, mencionó el funcionario estatal, a los 28 municipios con el menor índice de desarrollo humano, para mejorar las condiciones de vida de los más pobres, se trata de generar ingresos e incrementar la productividad. Por otra parte, el diputado local del PRI, Juan López Girón, refirió que al menos siete de las 12 etnias enfrentan un proceso de pérdida de su lengua materna, se trata de grupos minoritarios, en cuyas escuelas falta material didáctico para el fortalecimiento del habla. Añadió que maestros de los llamados bilingües no hablan la lengua de la localidad, ni siquiera la que corresponde a su grupo étnico.
Del Valle sostuvo que existe mayor atención a los llamados grupos étnicos mayoritarios, como al tzeltal y tzotzil, que cuentan con una población de por los menos 400 mil personas, y todos hablantes de su lengua, así como los zoques, choles y tojolabales.
En tanto que en los grupos étnicos mame, cachiquel, mocho, lacandón, jacalteco, cancobal y chuje, además de tener una población reducida, cada vez hay menos hablantes de su lengua materna, abundó.
El funcionario dijo que los factores son varios, como la migración, pero cuando los indígenas alcanzan su educación profesional, muchas veces les da vergüenza volver a hablar su idioma o lengua materna. [c]
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