El Gobierno de la Ciudad de México informó que Felipe de Jesús Pérez Luna, ‘El Ojos’, usaba a jóvenes de 15 y 22 años como repartidores de drogas en bicicletas y mototaxis a los que igualmente usaba de ‘halcones’.

CIUDAD DE MÉXICO.- El recién abatido Felipe de Jesús Pérez Luna, El Ojos, líder de un grupo criminal que opera en la parte suroriente de la Ciudad de México, reclutaba niños para distribuir mariguana, grapas, tachas y monas en calles y estaciones del Metro.

“El Ojos tiene bajo sus órdenes a jóvenes de entre 15 y 22 años, quienes reparten droga en bicicletas y mototaxis en algunas estaciones del Metro, dentro y fuera de unidades habitacionales”, apunta un informe del Gobierno de la Ciudad de México.

El documento fue elaborado como parte de la investigación que derivó en el operativo del 20 de junio pasado en la colonia La Conchita Zapotitlán, en el que murió El Ojos y siete de sus sicarios al enfrentar a elementos de la Secretaría de Marina-Armada de México.

La indagatoria permitió identificar la estructura del grupo y la forma en que opera para distribuir droga, incluso con entregas a domicilio mediante mototaxistas, bicitaxistas o repartidores de agua, a los que igualmente usa de “halcones”.

Gracias al análisis de datos y red de vínculos se supo que familiares de El Ojos lo sucedieron en el liderazgo del grupo, entre ellos están su hijo Felipe de Jesús Pérez Ramírez, El Felipillo, y su sobrino Ricardo Ferro Pérez, alias Peque o Richi.

En la estructura también están su cuñado Carlos Alejandro Mendoza Sandoval, El Cindy; su sobrino Fernando Pérez, El Fercho; Armando Pérez, El Armando; María de los Ángeles Ramírez, Jela, esposa de El Ojos, y Berenice García Pérez, Angie, sobrina del capo, así como su hijo Miguel Ángel Pérez Ramírez, El Micky, detenido por el homicidio de Felipe Carmona Dávila, excomandante del Estado de México, y su yerno Gerardo Paredes Estrada, a la fecha preso.

Las autoridades documentaron 30 asesinatos, en 19 eventos suscitados entre 2014 y 2016 en las delegaciones Iztapalapa, Tláhuac y Xochimilco, todos ordenados por El Ojos y ejecutados por sus sicarios.

Entre las víctimas mortales de El Ojos están el policía del Estado de México Crescencio Rafael Soto Magaña, y los policías de la Ciudad de México Alejandro Torres Espinoza y Francisco Javier Rodríguez Blas.

También se contabiliza a Felipe Carmona Dávila, excomandante del Estado de México; así como dos mujeres, un repartidor de agua y un muchacho identificado como Axel Méndez Cruz, de apenas 15 años de edad.

Según el reporte, el grupo de El Ojos está vinculado a la venta al menudeo de mariguana, cocaína en polvo y piedra, así como solventes (monas), además de que se le atribuyen los delitos de homicidio, extorsión, despojo de propiedades y asalto al transporte.

A su gente, por ejemplo, se le vincula con el asalto a un transporte público, ocurrido el 27 de julio de 2016, en la colonia La Conchita Zapotitlán, en el que viajaba un elemento de la Marina-Armada, quien trató de evitar el atraco.

Los hechos derivaron en una balacera dentro del autobús, hecho en el que una persona falleció y ocho más resultaron lesionadas. En el asalto participó Ricardo Ferro Pérez, Peque o Richi.

De acuerdo con el informe de las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México, para todas estas actividades ilícitas, la organización de El Ojos utiliza a jóvenes de entre 15 y 22 años, e indistintamente tiene reclutados a mujeres y hombres.

A la fecha, la Procuraduría capitalina ha reportado la detención de al menos 36 integrantes de esta organización criminal, cuya estructura operativa podría estar conformada por al menos 500 personas.

Con dicha estructura se busca hacer frete al grupo antagónico autollamado Cártel de Chalco, que es liderado por Gastón Montealegre Medina, bajo la mira del gobierno capitalino y federal.

Por El Financiero