Una persona es adicta cuando busca de manera excesiva tener sexo
Tener sexo es uno de los mayores placeres de la vida, pues nada mejor que estar con nuestra pareja, relajarnos y llenarnos de felicidad por un buen rato.
Por ello, siempre buscamos cualquier excusas para vivir momentos apasionados; sin embargo, el deseo constante de tener sexo puede convertirse en una adicción que puede causarnos diversos problemas.
Se dice que una persona es adicta al sexo cuando desea de una manera excesiva tener una relación sexual, sin importar el lugar o momento en el que se encuentre.
La doctora Ellen Hendriksen, psicóloga en la Universidad de Boston, explica que las personas adictas al sexo se caracterizan por seis comportamientos, los cuales son:
Incongruencia
La necesidad constante de tener sexo, aleja a la persona de sus hábitos comunes, de su trabajo, familia y de sus gustos, aficiones o metas.
Falta de control
Una persona adicta al sexo busca la gratificación inmediata y descuida otros aspectos importantes como la salud, seguridad e incluso su propia vida.
Compulsión
Se busca tener una relación sexual no para sentirse mejor, sino para no sentirse mal por no practicar sexo.
Este es un rasgo que se comparte con otras adicciones.
Dependencia
Al igual que otras adicciones como el alcohol o drogas, el adicto al sexo no puede estar sin tener relaciones sexuales.
Cuando no las tiene puede tener ataques de ansiedad o ira.
Fusión de sensaciones
El adicto fusiona el sexo con otras emociones que no tienen relación como la felicidad, autoestima, miedo o tristeza.
Comúnmente el deseo de tener sexo se incrementa cuando la persona está deprimida o ansiosa.
Disfunción
Las relaciones de pareja se deterioran porque el adicto termina “utilizando” a la otra persona para saciar sus necesidades.
(Con información de 20 minutos)