La violencia desatada por grupos criminales en la región Sierra y Fronteriza de Chiapas, sigue desplazando a pobladores de comunidades de la zona; este viernes 26 ocho familias chiapanecas cruzaron a Guatemala huyendo de las hostilidades de los carteles de la droga que se disputan el territorio desde 2021.
Con este nuevo desplazamiento forzoso, suman 405 ciudadanos mexicanos que han entrado a Guatemala por caminos de extravíos desde el domingo pasado, confirmó el ayuntamiento de Cuilco del vecino país.
“Hoy estuvo entrando más gente; llegaron a la escuela rural de la comunidad de Ampliación Nueva Reforma, donde se instaló un albergue desde el miércoles para brindarles ayuda”, dijo vía telefónica un funcionario de la alcaldía.
El jueves 25 un hombre refugiado de la tercera edad, falleció en el albergue presuntamente de un paro cardíaco, por lo que tuvo que ser enterrado en esa comunidad, comentó.
De acuerdo al registro del cabildo, los refugiados son entre 400 y 500 personas campesinas habitantes de comunidades rurales fronterizas que comenzaron a llegar desde el domingo 21 de julio provenientes principalmente del municipio de Amatenango de la Frontera Chiapas distante a unos 18 kilómetros de Cuilco.
“Las organizaciones criminales les impidieron huir a otra parte de Chiapas, por lo que cruzaron el rio para internarse a Guatemala. Las familias salieron con lo que pudieron. Estuve platicando con ellos, me dijeron que salieron con pocas pertenencias porque los hombres armados no les permitieron sacar sus cosas. No les avisaron que tenían que salir. En algunas localidades les avisaron que tenían que salir en 24 horas. A ellos no, sólo los llegaron a rafaguerar y salieron como pudieron”, comentó.
Señaló que los refugiados tuvieron que caminar largas horas por la montaña ya que las carreteras están bloqueadas. Primero llegaron a la municipalidad muy agotados, pero los movimos por su seguridad para Ampliación Nueva Reforma que está a entre una hora y media y dos horas de distancia en vehículos de doble tracción”.
Dijo que una mujer embarazada que se sintió mal fue trasladada a la cabecera municipal de Cuilco, perteneciente al departamento de Huehuetenango.
El funcionario del ayuntamiento que pidió no se le mencionara, informó que este viernes llegó personal de Migración de Guatemala y “juntos estuvimos donde está la gente albergada en Ampliación Nueva Reforma, donde hay entre 250 y 300 personas; además, hay otros dos albergues en dos comunidades más con unas cien personas más; en la localidad de Jocotitán hay entre 20 y 30 personas refugiadas”.
Comentó que “el número de personas refugiadas puede llegar a 500 porque muchas están en casas particulares, llegan comer a los albergues y se regresan. Pero cuando estuvimos ahí estaban llegando más gentes hoy. Hay varias instituciones de gobierno y no gubernamentales atendiéndolos.
Migración llevó este viernes, despensas para 300 personas y colchonetas, aparte del apoyo que están brindando a los mexicanos otras instituciones, iglesias, comerciantes y algunas comunidades grandes. “Todo mundo está colaborando con lo que se pueda”.
“Los mexicanos refugiados están contentos, agradecidos con la gente y con el gobierno porque hay varias instituciones brindando apoyo, incluso Migración les ofreció documentos para que se muevan en Guatemala sin problemas”, comentó.
La violencia provocada por las bandas del crimen organizado ha ido escalando desde 2021, siendo las principales víctimas campesinos que viven en las regiones rurales fronterizas. La población había pedido el apoyo de autoridades en diversos momentos, sin resultados.
(Con información de Proceso)